4 tipos de relación

¿Amor o necesidad?

Si nunca hemos realizado un proceso personal para conocernos a fondo y apreciarnos tal y como somos , lo más probable es que desarrollemos relaciones que tengan que ver con las necesidades inconscientes no resueltas de nuestra infancia. Por lo tanto, vamos a buscar relaciones desde la necesidad o carencia y no, desde una parte plena y desarrollada…

Nos empeñaremos en buscar, inconscientemente, relaciones que completen o suplan aquello que no tuvimos en nuestra historia pasada, nuestras inseguridades y necesidades insatisfechas. Hay tres tipos de relación que cumplen esta función : relaciones simbióticas, las parásitas y las dependientes, mientras que las que se considerarían sanas serían las sinérgicas. Veamos ahora las características de cada una de ellas.

Relaciones simbióticas

  • En este tipo de relación las dos personas se apoyan y alimentan mutuamente desde sus propias necesidades y carencias individuales generadas en el pasado.
  • Si están solos/as los miembros se sienten incompletos/as, ya que ninguno tiene clara su propia identidad y esto les genera mucha inseguridad.
  • Necesitan al otro/a para sentirse completos/as. Más allá de sentirse bien o mal en compañía uno del otro no pueden visualizarse a sí mismos por separado.
  • Creen que el verdadero amor significa fundirse en la otra persona, complementarse y estar juntos/as en todo. Basan su sentido de identidad en ser parte de la relación .
  • Suelen tener los mismos intereses y amistades y lo hacen todo juntos/as. Les cuesta mucho terminar la relación y soportan cualquier cosa, por dolorosa que sea, por temor al vacío y a la soledad.
  • La relación dependiente que generan está más basada en una adicción que en amor. Si por fuerza mayor la relación termina, tienen un fuerte trauma de amor, ya que han basado ambos su estabilidad en el otro/a.

Relaciones parasitarias

  • En este tipo de relación uno de los dos toma mucho del otro/a en cualquier aspecto o en todos: emocional, financiero, espiritual, mental, lo toma porque el otro/a se lo da voluntariamente o bien, manipula para conseguirlo.
  • Es factible que lo haga porque se siente víctima pues cree que no tiene las mismas posibilidades que su compañero/a y busca la manera de compensar sus carencias a través del otro/a.
  • En realidad el que toma, está en la relación porque quiere obtener algo, por lo tanto, no se trata de una relación sana sino de una relación por interés.
  • Los motivos por los que una relación parásita termina es por este desequilibrio, ya sea porque el parásito ha obtenido todo lo que quería del otro o porque la otra parte se ha cansado de ser usado, de ser quien siempre da y porque pocas veces o nunca recibe algo a cambio.

Relaciones dependientes

  • En este tipo de relaciones no son conscientes de qué les mantiene atadas , mientras que en las parásitas el parásito suele saber cuál es el beneficio que busca y obtiene del otro/a.
    Los dependientes tienen la creencia de estar enamorados, aunque, en realidad, lo que están es necesitados y no fusionados.
  • En este tipo de relación uno puede ser dependiente aunque el otro no. Es el caso de muchas mujeres u hombres sumisos, adaptables y complacientes que creen que sin su compañero o compañera no son nada.
  • Creen que su deber es hacer feliz y someterse al otro y que esa es la manera de ser felices ellos mismos y lograr la paz. El dependiente lo aguanta todo o casi todo y siempre está buscando la manera de complacer.
    La única manera de transformar esto es romper el cordón umbilical y trabajar por alcanzar su autonomía y para ser libres de recuperar su dignidad, su amor propio y su poder personal.
  • En el fondo, lo que los dependientes necesitan no es de otro, sino de encontrarse así mismos, de aprender a valorarse y quererse

 

Relaciones sinérgicas

  • Se trata en este caso de dos personas independientes y con mucha autoestima que eligen libremente estar juntos/as .
  • Si les observamos separadamente podemos ver que son personas fuertes, pero, estando en relación, son más fuertes aún y más felices.
  • Son conscientes de que compartir su vida con la persona adecuada puede hacerlos sentir más completos/as.
  • Juntos/as pueden madurar y desarrollarse, gracias a la relación, pues hacen proyectos en común considerando y balanceando las necesidades de ambos/as.
  • Este tipo de relación está basada en la filosofía de la vida compartida y en la confianza del intercambio recíproco.
  • En la relación ambos/as tienen sus propios intereses, actividades, amistades , además, comparten un espacio común; un nosotros/as donde ambos/as deciden y participan de manera equitativa.
  • La relación sinérgica puede terminar porque, aunque haya funcionado por un tiempo, los intereses han cambiado y ahora buscan diferentes objetivos. Terminan, generalmente, por común acuerdo, de manera consciente, equilibrada y civilizada, sin culparse, asumiendo de manera consciente y generosa la razón por la que sus caminos se deben separar.

 

Cuando la relación llega a su fin, la sensación de valía, capacidad y seguridad puede verse afectada de alguna manera, dependiendo del tipo de relación que se ha establecido. Esto tiene un lado negativo, pues genera malestar , y un lado positivo, pues motiva a ambos individuos a aprender lo que tienen que hacer para sentirse bien y para lograr generar relaciones más sanas y equilibradas.